En función de cuál sea la causa u origen de la infertilidad, los profesionales podrán intervenir en mayor o menor grado en el funcionamiento del sistema reproductor masculino y femenino, para ayudar a conseguir la gestación. En general, es posible actuar en cualquiera de las partes del proceso reproductivo, pero las más destacadas son: el crecimiento de los óvulos, la ovulación, el transporte de gametos a través del tracto reproductor y la fecundación.
A
día de hoy, entre un 12% y 18% de parejas que quieren tener un hijo descubren
que sufren infertilidad. En un 30% de los casos, las causas son de origen
masculino, y en otro 30% de origen femenino. Asimismo, también es posible que
ambos miembros presenten problemas de fertilidad, lo que correspondería a un
20% de los casos. El 20% restante corresponde a la esterilidad de origen
desconocido (EOD), cuando las causas no se pueden identificar.
Por
otro lado, las técnicas de reproducción asistida (TRA) también pueden ayudar a
otras personas a lograr ser padres: hombres y mujeres solteros/as y parejas
homosexuales.
Los principales tratamientos de fertilidad que existen hoy en día son la inseminación artificial (IA) y la fecundación in vitro (FIV), que pueden ser combinados con técnicas como la donación de gametos o el diagnóstico genético preimplantacional, entre otras.
1. https://www.reproduccionasistida.org/reproduccion-asistida/
2. https://www.sefertilidad.net/docs/pacientes/spr_sef_fertilidad.pdf
3. https://ivi.es/tratamientos-reproduccion-asistida/
IMAGEN
roduccion-asistida/